Dos investigaciones realizadas de manera independiente por Universidades de los Estados Unidos, han concluido que el ejercicio físico puede disminuir en las mujeres el riesgo de contraer cáncer de mama, una de las enfermedades más comunes dentro del género femenino.Es importante destacar que pese a su importancia, ya que se detectan un millón y medio de casos nuevos por año según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de mama no es la dolencia que más vida de mujeres cobra, ese lugar es ocupado por las enfermedades coronarias.
Asociar la actividad física con la disminución del riesgo de padecer cáncer de mama, es una idea que comenzó a gestarse hace un año aproximadamente, a través de las investigaciones que llevaron adelante profesionales de la Universidad del sur de California.
Recientemente se han conocido nuevos aportes, en este caso de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington, cuyos profesionales han seguido la línea de investigación pudiendo determinar que, cuanto antes se inicie la actividad física, mayores serán los beneficios que se obtendrán.
De los estudios, que fueron realizados durante 6 años, participaron 65 mil enfermeras de entre 24 y 42 años, las que debieron responder un cuestionario extenso que incluía preguntas referidas a su juventud. Se pudo concluir que, mantener una rutina de ejercicios físicos desde la adolescencia y durante toda la vida, será un factor decisivo ante el cáncer de mama.
Los especialistas aclaran que no es necesario convertirse en un gran atleta, bastará con mantenerse siempre en movimiento, principalmente entre los 12 y los 22 años.