La bulimia, también llamada bulimia nerviosa, es un trastorno que hace que la persona que la padece sufra de episodios de atracones de comida, los que son seguidos de un profundo sentimiento de culpa y falta de control. Esto deriva en que el afectado decida ayunar o reducir violentamente la cantidad de alimentos, hasta que no soporta más y el proceso se repite.Los atracones, en el caso de la bulimia, consisten en ingerir en menos de dos horas una cantidad de comida extremadamente superior a lo que una persona podría comer en un estado normal. Más allá de que no existe un tipo de alimento específico al que se acuda en este tipo de ataques, generalmente los bulímicos apelan a todo tipo de dulces y alimentos de alto contenido calórico (helados, chocolates, etc.)
Dado que esta situación avergüenza a quienes padecen bulimia, los atracones se producen habitualmente a escondidas y la conducta anormal trata de ser ocultada al entorno. También es común que los bulímicos se provoquen vómitos para tratar de reducir los efectos de los atracones, en menor medida apelan al uso de diuréticos, laxantes, ejercicio físico intenso e incluso enemas.
Como ocurre con la mayoría de los padecimientos una detección temprana facilitaría un tratamiento contra la bulimia pero, teniendo en cuenta lo antedicho, esto resulta muy difícil porque la persona buscará por todos los medios ocultar la situación. No obstante, una vez detectada la enfermedad, se recomienda la consulta con un profesional médico, el que seguramente también derivará al paciente a un grupo de apoyo, donde otras personas con el mismo padecimiento comparten sus experiencias y buscan de manera conjunta una solución para todos.