Complicaciones del embarazo: preeclampsia

Entre las posibles complicaciones que puede presentar el embarazo se encuentra la denominada preeclampsia (también se la conoce como “toxemia del embarazo” o “hipertensión inducida del embarazo”), que tiene relación directa con la presencia de elevados niveles de proteína en la orina.

La preeclampsia se ha convertido en la complicación más común en el embarazo y a la vez resulta la más peligrosa porque, en los casos severos, llega a poner en riesgo la vida del feto y de la madre. Lo ideal sería conseguir un diagnóstico temprano de la enfermedad.

Los médicos reconocen a la preeclampsia como un conjunto sintomático o cuadro clínico, por lo que es difícil hablar de un factor en particular que la cause. Existen diversas etiologías para este trastorno que afecta a las mujeres embarazadas.

Entre los posibles factores que causan la preeclampsia se encuentran:

- Determinado componente presente en la placenta que provoca disfunción endoletial en los vasos sanguíneos maternos, en aquellas mujeres que se muestran susceptibles.

- Elevada presión arterial, que desemboca en una eclampsia, dañando el endotelio de la embarazada, además de los riñones y el hígado.

- Presencia de un desbalance entre óxido nítrico, prostaciclina y tromboxano.

- Disminución del índice de filtrado glomerular con retención de agua y sal.

- Factores asociados a la dieta de la embaraza.

- Deficiencias vitamínicas.

- Alteración de la reactividad vascular.

- Factores genéticos.

La medicina actual establece que la preeclampsia es un síndrome que se compone de dos etapas, en la primera existen gran predisposición de la placenta a la hipoxia, mientras que en la segunda se produce la liberación de factores solubles.

Por el momento la única cura posible para la preeclampsia es inducir el parto, ya sea a través de una cesárea o por aborto, pudiendo aparecer hasta seis semanas después del proceso.

 BUSCAR EN GOOGLE