De acuerdo a investigaciones realizadas en Europa, el incremento producido en las últimas décadas de los trastornos reproductivos en los hombres puede deberse al consumo de paracetamol y otros analgésicos a lo largo del embarazo.
Durante las pruebas efectuadas por los profesionales del viejo continente, se pudo comprobar que la utilización simultánea de diversos analgésicos, tal el caso del paracetamol y el ibuprofeno, durante el proceso de gestación hace que aumente el riesgo de que el bebé padezca Criptorquidismo, denominación que recibe un defecto congénito y que causa que uno o ambos testículos no desciendan al escroto.
En esa misma línea de investigación, también se comprobó como los medicamentos influyen de manera negativa en la calidad del semen y en la propensión a padecer cáncer de testículos al llegar a una edad adulta.
Los especialistas indicaron que las mujeres embarazadas que consumen analgésicos producen la desestabilización de la producción normal de andrógenos. Esto hace que el daño sea mucho mayor luego en el segundo trimestre del embarazo, que es cuando se forman los órganos reproductivos masculinos.