De acuerdo a las conclusiones que arrojó un estudio efectuado en Noruega, las mujeres que realizan ejercicios físicos mientras están embarazadas tienen menos posibilidades de concebir un bebé con mucho peso, destacándose el hecho de que no existe relación con la cantidad de ejercicio que realizaban antes de quedar embarazadas.
La investigación surgió ante la creciente cantidad de bebés extra grandes (más de cuatro kilogramos) que están naciendo alrededor del mundo, situación que puede producir serias complicaciones tanto para la madre (hemorragias posparto) como para el recién nacido (tendencia a ser obesos)
Katrine Mari Owe, responsable del equipo de la Escuela Noruega de Ciencias Deportivas que trabajó en el caso, indicó que con el paso del tiempo se ha ido reduciendo la cantidad de actividad física que realizan las mujeres durante el período de gestación, lo que tiene una relación directa con el tamaño que tendrán los bebés al nacer.
Cabe destacar que el equipo noruego pudo comprobar que existían mayores diferencias en el caso de las mujeres que estaban embarazadas por primera vez, por lo que se insta a los profesionales de la salud a promover la práctica regular de ejercicio, evitando así que los fetos se desarrollen demasiado.
De más está decir que, antes de iniciar cualquier rutina de ejercicios durante el embarazo es conveniente consultar con el médico de cabecera.